🚲 ACCIÓN: Ve al trabajo en un medio de transporte que muevas tú, o caminando. Si ya probaste el ayuno y te fue bien, repítelo. Puedes combinarlo con algo de actividad física por la mañana, y si ese día no puedes entrenar, al menos habrás ido al trabajo en bici o caminando.

💨 REACCIÓN: Los desplazamientos al trabajo se convierten en un gesto automatizado que por su alta repetición termina siendo muy relevante. Por ejemplo, recorrer 3km en coche para ir al trabajo supone una emisión de 300g de gases de efecto invernadero (GEI), pero si hacemos el cómputo anual con diez trayectos semanales (todos los días ida y vuelta), se convierten en 0,3 toneladas, de los cuales el CO2 no tiene la culpa que le quieren dar, pero hay otros que sí son dañinos.

Hacer ese trayecto caminando son menos de 30’, y hacerlo en bicicleta es poco menos de 10’.

No es un espacio para contar historias personales, pero mi abuelo (y muchos otros de la época) iba en bicicleta desde Palma hasta Alcúdia (55km) a trabajar 8-10h de albañil y volvía (110km en total). No en una bici de las de ahora, era prácticamente un chasis de moto con pedales, de unos 20-25kg. Como he dicho muchas veces, la actividad física NO ERA OPCIONAL.

Súmale los beneficios colaterales, exposición a la luz solar, aire exterior, movimiento propulsado por ti, sensación de autosuficiencia… No te lo digo yo, te lo dicen los estudios como éste. (41% menor riesgo de muerte prematura y 52% menos de riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares).